18 febrero, 2017

El tema

Hay un tema que detiene mi vida por completo, un tema que es inevitable, que me causa dolor de cabeza, de estómago. Un tema que es risible, que se queda estático mientras los días pasan. Con ese tema me siento pesada, anclada, rezagada. Quisiera dejar de hacerle caso, de darle tanta importancia, pero estoy tan enfrascada en él que es prácticamente imposible. Van varios años en que digo: "Este año, es el año", pero los días se desplazan sin resultado alguno.
Reflexiono mucho sobre el tema, me doy cuenta de mis miedos, pero sigo sin valor para afrontarlo. He llegado a la conclusión de que simple y sencillamente no quiero hacerlo, no quiero dirigir mi vida por ese rumbo, pero ya es demasiado tarde. Sueño con despertar un día y que el tema esté realizado. Al revisar mis avances, pienso que soy un fracaso y otras veces, las menos, me considero capaz. Ese tema consume mis días, más intensamente que el desamor, más intensamente que mi empleo. Y yo sólo me digo, cuándo será la bendita hora en que me decida a ponerle fin, en decirle adiós para siempre, en festejar hasta el cansancio por haberlo concluido.
Ese tema involucra una etapa de mi vida que fue muy triste y por eso siento que es lidiar no sólo con él, sino con el pasado. Y eso me pone mal. Porque es revisar de nuevo esos días en que me dejé guiar siempre por miedos, en que atendí voces que nada me aportaban, en que me alejé a pasos agigantados de mis sueños. Pero lo cierto es que, mientras el tema no termine, no podré cerrar por completo esa etapa. Me siento tan inútil a veces. Tan deplorable. Tan mal.
¿Será este año, el año?
Quiero pensar que sí, pero son tantas cosas que afrontar que me palpita la cabeza.
Hoy ando de pesimista.

Pero un día escribiré una entrada que dirá solamente: EL TEMA ESTÁ TERMINADO. Y ustedes deben dejarme muchos likes y mensajes de felicitación. Un día :c

05 febrero, 2017

Sabihondura

Huí de ese lugar porque yo no sabía nada, porque no me interesaba conocer lo que ellos, porque no me interesaba saber para lo que ellos. Las posturas, los guiños de complicidad, el breve gesto de discriminación cuando no dices lo correcto, lo esperado, lo inteligente. Quise seguirles el paso, pero me di por vencida, no me interesaba seguir esa línea. Huí de ese lugar. Que se queden ahí los dispuestos a citar mil autores, textos en su idioma original, teorías rebuscadas. Que se queden los que se sienten bien consigo mismos cuando dominan de principio a fin algún autor, alguna obra, alguna filosofía. No es mi camino. Me lapidé a mí misma por mi ignorancia, me insulté tanto por ser tan pobre de entendimiento. Así que me fui sólo para descubrir que vivía en un mundo viciado, en uno que todo el mundo crea en el pensamiento, pero donde la mayoría de los actos dejan mucho que desear. Huí, lo admito. Salí corriendo lo más rápido que pude y deseo no volver nunca. Que se queden los que son felices ahí, cada quien elige su lugar en este mundo. Yo hallé el mío, aunque ellos lo critiquen tanto. En el fondo sé que ni les interesa. No nos interesamos y eso es lo que me da paz.

Cada quien habla como le va en la feria.

Sólo sé que nunca había sentido tanta paz y tranquilidad que cuando me alejé de ahí.

02 febrero, 2017

¿Qué me detiene ahora?

Esta soy yo a principios de 2017:

1. Tengo 25 años.
2. Leo muchísimo más que antes y me he acercado con creces a la literatura infantil y juvenil.
3. Me pagan por compartir mi amor por la lectura con niños de todas las edades.
4. Soy booktuber.
5. Soy feminista.
6. Soy reservada.
7. Me encanta bailar.
8. Consumo mucho más café que antes.
9. Me encanta viajar.
10. Vivo en la Ciudad de México.
11. Estoy en proceso de titulación desde hace tres años.
12. Soy desordenada y es algo en lo que trabajo.
13. Soy soltera.
14. Mis zapatos favoritos son unos plateados, con plataforma de diez centímetros.
15. Amo cantar a todo pulmón.
16. Al menos una vez al mes hago nada.
17. Me encantan las películas de ciencia ficción.
18. Voy al cine sola.
19. Me gustan juntas la cerveza y las papas chips de jalapeño.
20. Considero que mis tuits más épicos son los más ignorados.
21. Amo comer en familia, en casa de mis padres.
22. Admiro a mis hermanos.
23. Prefiero caminar que tomar el transporte público.
24. Tengo tres mejores amigas y tres mejores amigos.
25. Soy onironauta.

:)